En el campo de la enseñanza de lenguas extranjeras los materiales humorísticos presentan un amplísimo espectro de posibilidades didácticas porque podemos dotarlos de la flexibilidad suficiente para que respondan en cada momento concreto a nuestros intereses, desarrollando una buena planificación que las vincule estrechamente a los contenidos que estemos trabajando. Las posibilidades de explotación de los materiales humorísticos son múltiples porque implican de forma constante a los alumnos, a quienes se propone trabajar tanto los efectos expresivos como los aspectos estéticos de la lengua.
Resultan muy eficaces tanto para desarrollar las cuatro destrezas básicas (expresión oral, expresión escrita, comprensión lectora y comprensión auditiva), como para trabajar las distintas áreas de habilidad que articulan la competencia comunicativa:
1. Competencia lingüística
a) nivel fónico: trabajo con los recursos prosódicos: entonación y pausas. Conocimiento de matices semánticos que se desprenden de los múltiples esquemas tonales.
b) nivel morfosintáctico: caracterización de la sintaxis coloquial, orden de los elementos en el seno oracional en función de su relevancia o finalidad expresiva, fórmulas enfáticas, comparaciones, reiteraciones, elipsis...
c) nivel léxico-semántico: enriquecimiento del vocabulario y la fraseología; aprendizaje del valor connotativo de palabras y expresiones, descubrimiento y adquisición de los valores ligados al contexto y a las situaciones; adaptaciones semánticas e innovaciones léxicas. Sufijaciones, combinaciones inesperadas y sorprendentes, dobles sentidos, ambigüedad, polisemia, valores figurados ocasionales...
2. Competencia discursiva
a) adquisición de fluidez y cohesión en las manifestaciones orales y escritas.
b) características textuales (aunque sea por contraste).
3. Competencia estratégica
a) trabajo con elementos paralingüísticos: gestos y mímica.
3. Competencias socio-cultural y socio-pragmática
a) alusiones referencias históricas y políticas, sobreentendidos. Recursos situacionales en relación con el medio, los personajes que intervienen... Captar el sentido discursivo determinado por factores para y extralingüísitcos (entonación gestos, situación, contexto verbal y cultural...); los contextos en los que se usan (o no se usan) los chistes, las actitudes y expectativas de los que los utilizan, y las convenciones que los oyentes tienen que seguir mientras se cuenta un chiste (no interrumpir, no anticipar la frase clave, y si el chiste es realmente malo y no hay mucha confianza, no hacer un comentario despectivo cuando haya terminado).
Isabel Iglesias Casal
Completamente de acuerdo que el humor es un recurso genial para las clases. Eso sí, siempre es complicado de entender así que yo personalmente lo trabajo al menos con alumnos de intermedio.
ResponderEliminarAprovecho también para decirte que en nuestro sitio web Spanish Podcasts) tenemos también publicados algunos chistes que pueden ser útiles. Además, subimos audios tanto para alumnos como profes pueden encontrar actividades para trabajar la escucha. Los audios tienen transcripción, preguntas, explicaciones de vocabulario clave y punto de gramatica en la mayoría de los casos.
Espero que sea útil.